Después de un mes de inactividad se reemprenden los trabajos en el órgano. Dado que las etiquetas de los registros no corresponden a la denominación instrumental propia del s. XVIII, decidimos cambiarlas por otras más acordes a la época de construcción del instrumento. Gracias a las investigaciones que hicimos sobre los Salanova, desde hace más de quince años teníamos archivadas las fotografías de las únicas etiquetas originales que se conservan del taller valenciano, esto es, las del órgano de Huescar, en la provincia de Granada.
A partir de ellas, nuestro socio Josep María Berenguer ha creado una tipografía completa con la que escribir las nuevas etiquetas. Después las ha caligrafiado con tinta roja para las capitales y tinta china negra para el resto. En cuanto al papel se ha optado por uno verjurado de hilo de color marfil adquirido en Basilea. Con la intención de conservar las etiquetas anteriores optamos por pegar las nuevas sobre una tabla fina y ésta sobre la fachada. La madera utilizada procede de unos tablones sin desbastar del propio órgano, obtenidos de desmontar el pasillo izquierdo, que ha sido eliminado. Hemos pegado en la parte posterior de cada tablilla una tirilla de piel enmarcándola por completo. Esta ha sido la que soporta la cola que pega cada tabla en la fachada. De este modo, si en un futuro se quiere eliminar el añadido, se puede hacer sin ningún problema.
El viernes, alrededor de las once y con todo el material necesario, llegamos al órgano dispuesto a colocar los nuevos registros. Primero planteamos las nuevas etiquetas sobre las tablillas, decidiendo donde se iban a colocar los registros que faltan en el órgano y los juguetes (pajarillos y campanillas) que se añadirán. En cuanto al tirador del «Ayre», o campana de aviso para el manchador se decide colocarlo en el antiguo tirador del trémolo eliminado, pues no tratándose de un registro propiamente dicho, queda mejor en dicha posición, que está fuera del conjunto de tiradores del instrumento.
Por otra parte, hemos recibido la noticia, de boca de Manuel Carvalho de Silva, que el registro de adorno «pajarillos» (en nuestro órgano se llamarán «Ruyseñores») ya está terminado. Finalmente, se trata de uno de cinco tubos, que esperamos colocar en las próximas semanas.